BODEGAS LUZDIVINA AMIGO son hoy Miguel Ángel y Javier, dos hermanos que luchan por mantener una tradición y apostar por un proyecto en el que volcar todo el conocimiento y la experiencia de la familia Amigo que se dedica a la viticultura desde hace tres generaciones. Así, se alarga la vida de la viña que tanto cuidaron sus padres y abuelos.
Nace así su proyecto mas personal, una bodega que lleva el nombre de su madre: Luzdivina. Una mujer que siempre está presente, sonriente y tranquila. Luzdivina es, sin más, la locomotora de la familia.
El impulso de la bodega. Y ese carácter se puede apreciar en sus vinos y viñedos, estos últimos son viejos, trabajados y representan una forma de ser.
Ante el crecimiento, responden con humildad. Es una bodega donde se comentan más los fracasos que los éxitos, porque de ellos se aprende y te ayudan a seguir creciendo. Por eso defienden cada sección de las más de 90 parcelas extendidas a lo largo de 14 hectáreas. De esta forma conservan la magia del proyecto, así consiguen que el trabajo de la familia Amigo forme parte de cada botella.





